Las movilizaciones contra las medidas del Gobierno deben ir más allá de las AA.PP.

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El conjunto de los ciudadanos debe dar una respuesta contundente al recorte planteado por el Gobierno.
Las organizaciones sindicales debemos reaccionar pensando en la globalidad y no defendido sólo intereses corporativos.

a Unión Sindical Obrera considera que las propuestas presentadas por el Presidente del Gobierno son el mayor recorte de derechos sociales de nuestra historia democrática y que debe darse una respuesta contundente al conjunto de ellas.

El retraso en la aprobación de las mismas por el Consejo de Ministros aduciendo razones técnicas, nos confirman la improvisación y la falta de rigor al proponerlas, y que han pesado más las presiones externas recibidas que la necesidad real de las mismas. Esta falta de concreción está generando una especial incertidumbre sobre los trabajadores de las empresas públicas, que se están preguntando si al mes que viene verán reducido y en qué cuantía su salario.

El inminente recorte salarial para el personal del sector público hace necesario una respuesta inmediata en este ámbito. Por ello la USO a través de su Federación de Empleados Públicos convocará movilizaciones en el conjunto de las Administraciones Públicas, incluida la convocatoria de la huelga general en ellas. La Federación de Empleados Públicos de la USO ha convocado a diversos sindicatos de este ámbito, con representación a nivel estatal y autonómico, para concretar movilizaciones conjuntas.

Este sindicato entiende que la respuesta al Gobierno debe ser rápida y contundente, pero no puede limitarse exclusivamente al ámbito de las Administraciones Públicas, y que la huelga convocada en ellas debe ser el primer paso para convocar a la movilización al conjunto de la ciudadanía, incluyendo la huelga general.

Para la USO lo importante es dar una respuesta unitaria – y en este sentido se ha dirigido a UGT y CC.OO- a la situación de los trabajadores del sector público y a los más de 4.600.000 desempleados, al millón trescientas mil familias con todos sus miembros en paro, a los 9 millones de pensionistas, a los jóvenes que padecen un tasa de paro superior al 40%, al recorte de las inversiones, a la falta de reformas estructurales, etc. Por ello es necesario que las organizaciones sindicales actuemos pensando en la globalidad y no defendido sólo intereses corporativos.

Además, desde la USO seguimos insistiendo en que no se puede actuar sólo sobre la reducción del gasto, hay que actuar sobre los ingresos para generarlos, y eso implica hablar del empleo, y poner a las personas, a los ciudadanos españoles, en el centro de las políticas, es decir, servir a los ciudadanos y no servirse de ellos para cuadrar las cuentas. Es necesario abordar una reforma fiscal en profundidad para conseguir erradicar el fraude fiscal y que todos tributemos con arreglo a los ingresos reales.

LSB-USO
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