Desde hoy, 1 de marzo, la factura de la luz para los hogares vuelve a estar gravada con un IVA del 21 %, en lugar del reducido del 10 %. Esto se hace con base en el Real Decreto-ley 8/2023, conocido como decreto ómnibus, por haber mezclado en su articulado, largo, denso y desordenado, un sinfín de regulaciones de orden fiscal, social, económico y laboral, sin conexión entre ellas.
“USO considera ese decreto imprudente, teniendo en cuenta aún el escenario inflacionario, y esta corrección para marzo así lo corrobora. De repente, a algunas familias se les baja ligeramente la factura de la luz, pero lo pierden en impuestos. Nuestro sindicato siempre ha defendido y mantiene que los suministros básicos deben tener un IVA superreducido. Poner la calefacción en invierno no puede convertirse en un lujo”, denuncia Joaquín Pérez, secretario general de USO.
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