La conciliación familiar, una quimera aún muy lejana

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Pese a los indudables avances vividos en las últimas décadas, la conciliación total sigue todavía sin ser una realidad. Cuatro de cada diez mujeres españolas aseguran que han tenido que renunciar a algún puesto de trabajo o ascenso laboral por tener hijos o personas dependientes a su cargo, frente al 12% de los hombres. Además, según el estudio ‘Conciliación y Familia’, realizado por la Fundación Pfizer, el 69,3% de las mujeres encuestadas están seguras de que ser madre puede afectar negativamente a su trayectoria laboral, frente al 21,1% de los hombres.

Respecto a las tareas diarias de la casa, el informe muestra que solo en el 16,6% de las familias se divide el trabajo doméstico a partes iguales. El 59,5% de los encuestados asegura que es la madre quien se ocupa de ellas, frente al 10,3% de los hombres. Además, las cifras varían dependiendo de quién sea el consultado. El 43,7% de las mujeres opina que el reparto de las tareas de la casa está poco o nada equilibrado, mientras que solo el 25,3% de los hombres contesta lo mismo.

El tiempo que se dedica a esas tareas también difiere mucho según los sexos. Mientras que las mujeres explican que dedican 4,7 horas diarias al cuidado de la casa y la familia (o 3,8 horas si están empleadas), los hombres aseguran que en su caso son 2,5 horas (o 1,9 horas si trabajan). «Seguimos en una España patriarcal, donde la mujer tiene muchas dificultades en el mundo laboral, y en especial en el ámbito de la conciliación», asegura Pedro Núñez Morgades, miembro de la Fundación Pfizer, durante la presentación del informe.

Más horas pero menos productivas

Para facilitar la conciliación, las medidas más valoradas entre los españoles son el «acoplamiento» entre los horarios de colegios y los laborales (18%), la flexibilidad en los horarios de entrada y salida del trabajo (14,8%), la opción de trabajar en jornada continua (13,7%) y la ampliación de las ayudas públicas para guarderías (13,2%). La vicepresidenta de la Comisión Nacional para la Racionalización de los Horarios Españoles (ARHOE), Nieves Alarcón, explica que hablar de conciliación sin hablar de horarios no tiene sentido y que los españoles deberían organizar mejor el tiempo en el trabajo.

«No sirve de nada estar diez horas calentando una silla si hacemos menos que otros trabajadores europeos en seis», sostiene Alarcón, haciendo referencia a la diferencia entre España y el resto de Europa respecto a las horas trabajadas y la productividad.

Así, la vicepresidenta de ARHOE ha asegurado que los españoles trabajan 277 horas más al año que los alemanes y holandeses y, sin embargo, «ellos son mucho más productivos». En su opinión, las jornadas prolongadas perjudican la calidad de vida de los empleados, y eso va en detrimento de las empresas.

LSB-USO
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